Entrega de presunto involucrado en crimen de Ayotzinapa
El gobierno estadounidense ha realizado la deportación controlada de Edgar Damián Sandoval Albarrán, alias La Rana o El Wereke, figura señalada como testigo crucial en la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, según fuentes federales. El individuo ha sido remitido ante un juez federal radicado en Toluca para enfrentar cargos por asociación delictuosa y desaparición forzada.
Según informaron autoridades de ambos países, un tribunal estadounidense autorizó su entrega, efectuada mediante el cruce internacional entre Nogales, Arizona y Nogales, Sonora, en las últimas horas previas al anuncio.
Antecedentes judiciales y acusaciones
La Juez Segunda de Distrito de Procesos Penales Federales en el Estado de México había emitido órdenes de captura en julio de 2024 contra el imputado por su presunta participación en actividades criminales organizadas y privación ilegal de libertad. Durante el periodo de los hechos en 2014, se desempeñaba como vigilante y ejecutor para Guerreros Unidos, organización criminal vinculada a la desaparición de los estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos.
Tras ser detenido por ingreso ilegal a territorio estadounidense a principios de año, la Fiscalía General de la República presentó una solicitud de detención provisional con fines de extradición ante las autoridades norteamericanas. El 9 de junio pasado, organismos migratorios de Estados Unidos confirmaron que el sospechoso estaba sujeto a procedimientos migratorios, culminando en una orden de deportación tras audiencia judicial correspondiente.
Presunta participación en los hechos
Según investigaciones de la extinta Procuraduría General de la República, El Wereke recibió instrucciones directas de Felipe Rodríguez Salgado, conocido como El Cepillo, líder de sicarios de Guerreros Unidos, para disparar contra estudiantes ya privados de su libertad.
La institución ofrecía previamente una recompensa de 1.5 millones de pesos por información que condujera a su captura. Documentos oficiales indican que el sospechoso fue uno de los individuos que interceptó a los estudiantes cerca del relleno sanitario de Cocula, tal como se detalla en el primer volumen del expediente público del caso.
De acuerdo con testimonios incorporados en el expediente, El Wereke junto con Patricio Reyes Landa, apodado El Pato, y dos delincuentes más identificados como El Wasa y El Primo, se encargaron de transportar restos humanos en envases plásticos y posteriormente arrojarlos al Río San Juan.