Expansión de infraestructura de seguridad fronteriza
El Departamento de Defensa estadounidense dio a conocer este miércoles la creación de dos nuevas áreas clasificadas como zonas de seguridad militar en la frontera compartida con México. Esta estrategia permite a las fuerzas armadas realizar detenciones temporales de personas que crucen irregularmente la línea divisoria.
Según confirmaron autoridades federales, una de estas zonas denominadas “Zona de Defensa Nacional” cubrirá aproximadamente 402 kilómetros del río Bravo en territorio tejano, operando bajo la jurisdicción de la Base Conjunta de San Antonio. La segunda área estratégica estará bajo el control de la Estación Aérea del Cuerpo de Marines en Yuma, Arizona.
Marco legal y controversias judiciales
El establecimiento de estas zonas busca facilitar el despliegue de personal militar sin necesidad de recurrir a la Ley de Insurrección de 1807, que permite al presidente movilizar al ejército para contener disturbios civiles. Sin embargo, los resultados de esta política han sido variados en el ámbito judicial.
En Texas y Nuevo México, tribunales federales han archivado casos de allanamiento contra migrantes detenidos en estas áreas, argumentando que los involucrados desconocían la naturaleza restringida del territorio. Pese a ello, más de un centenar de personas aceptaron culpabilidad por ingreso ilegal en Texas, mientras que en Nuevo México se registraron las primeras sentencias condenatorias el 18 de junio pasado.
Contexto político y estadísticas migratorias
El gobierno de Donald Trump ha atribuido el descenso en flujos migratorios irregulares al fortalecimiento de controles fronterizos, incluyendo la presencia de unidades militares activas. El mandatario republicano ha posicionado la seguridad fronteriza como eje central de su campaña electoral.
Actualmente, cerca de 11,900 efectivos están desplegados en la frontera. Las autoridades reportan que los cruces ilegales alcanzaron niveles históricamente bajos en marzo, coincidiendo con la finalización del proceso de solicitudes de asilo iniciado durante la administración de Joe Biden y el reforzamiento de controles migratorios por parte de México.
Impacto operativo limitado
Un alto mando del Pentágono señaló que, a pesar de existir dos zonas operativas previas, apenas se han registrado cuatro detenciones temporales en dichas áreas. Esto pone en evidencia la discrepancia entre la implementación de medidas legales y su efectividad práctica en el terreno.