Condena en suelo estadounidense
El destacado operador financiero del Cártel Jalisco Nueva Generación, José González Valencia, conocido en círculos delictivos como ‘El Chepa’, recibió una sentencia de tres décadas en prisión en territorio estadounidense. El individuo de 49 años fungía como cabeza visible de Los Cuinis, estructura especializada en manejo de recursos para la organización criminal más poderosa del occidente mexicano.
Raíces en Michoacán y vínculos familiares
Nativo de Michoacán, el sentenciado construyó su imperio junto a sus hermanos Gerardo y Abigael. Su trayectoria ilícita se entrelaza directamente con la cúpula del CJNG, particularmente a través de su hermana Rosalinda, quien contrajo matrimonio con Nemesio Oseguera Cervantes, identificado como ‘El Mencho’ y líder indiscutible del cártel. Rosalinda cumplió condena en México por delitos financieros, obteniendo su libertad en febrero de 2025.
Inicios delictivos y métodos de transporte
Según consta en registros judiciales, sus actividades prohibidas se remontan a 2006 cuando organizaba envíos de cocaína hacia el vecino del norte. La organización utilizó diversos medios para el traslado de estupefacientes: aéreo, terrestre, marítimo y hasta submarino. Un caso emblemático fue la incautación en 2007 de un semisumergible con 4 toneladas de cocaína proveniente de Colombia.
Acciones violentas y suministro de armamento
Además de su rol logístico, se le atribuyen actos de violencia extrema, incluido un homicidio motivado por el robo de un cargamento de mil kilogramos de droga. Las autoridades estadounidenses lo señalan también como proveedor de armas y municiones para las operaciones del CJNG, organización catalogada por Estados Unidos como una de las más peligrosas en el ámbito internacional.
Periplo migratorio y captura
Durante años elictivos, González Valencia se movió bajo identidad falsa por Bolivia antes de ser arrestado en Brasil durante un viaje recreativo en 2017. Posteriormente fue trasladado a Estados Unidos mediante un proceso de extradición que culminó con su reciente sentencia.
Efectos colaterales en la cúpula delictiva
Simultáneamente, otro miembro destacado de la organización, Cristian Fernando Gutiérrez-Ochoa, apodado ‘El Guacho’ y vinculado familiarmente con ‘El Mencho’, admitió su responsabilidad en actividades de lavado de dinero. Esta confesión podría traducirse en hasta 20 años de reclusión según el marco legal vigente.