La Profepa aplicó una sanción económica de 939,602 pesos y clausura administrativa a una planta de procesamiento no autorizada ubicada en Coatzacoalcos, estado de Veracruz. A pesar de las medidas impuestas en marzo de este año, el sitio continúa operando de manera irregular según confirmación oficial.

Operación ilegal y desafío a la normatividad ambiental

La empresa identificada como Energía Ecorenovable fue sorprendida realizando actividades de deforestación para la construcción de una mini refinería desde el año 2019, utilizando su registro como planta de tratamiento de residuos industriales como fachada legal. “Pese a la clausura formal del inmueble el 25 de marzo, la operación continúa activa”, declaró la autoridad ambiental en comunicación exclusiva.

Evidencia satelital confirma transformación del terreno

Análisis de imágenes históricas de Google Maps revelan que el predio mantenía vegetación densa hasta 2017, con árboles y arbustos adyacentes a la carretera Coatzacoalcos-Villahermosa. Para agosto de 2019 ya se observaban maquinaria pesada y modificaciones significativas del suelo, mientras que en 2021 aparecían estructuras metálicas permanentes y equipo especializado.

Recurso legal no detiene actividades irregulares

La empresa sancionada presentó un recurso de revisión contra la decisión de clausura, solicitando la reconsideración del acto administrativo. “La presentación de este mecanismo legal no suspende la obligación de cumplir con la normatividad ambiental vigente”, explicó la Profepa. No obstante, el centro de procesamiento continúa sus operaciones pese a carecer de autorizaciones legales.

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Alerta académica por deterioro geológico

Un grupo de especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha revelado que ciertas áreas de la capital mexicana están experimentando hundimientos alarmantes, con consecuencias potenciales para sus habitantes en los próximos años.

Según los análisis técnicos, la combinación de sobreexplotación de agua subterránea y la carga estructural de edificaciones modernas ha generado una compactación extrema de los estratos geológicos, provocando descensos del terreno que en algunos casos alcanzan los 40 centímetros anuales.

Proyecciones preocupantes

Sergio Rodríguez, investigador universitario, destacó que el promedio general de descenso oscila entre 15 y 30 centímetros anuales. Esta situación, de mantenerse, podría generar una caída acumulativa de hasta 3 metros en una década, con efectos catastróficos en el mediano plazo.

Mapa de zonas críticas

Los estudios señalan específicamente cinco jurisdicciones con mayor vulnerabilidad: Cuauhtémoc, Iztapalapa, Tláhuac, Iztacalco y Gustavo A. Madero. Estas demarcaciones se asientan históricamente sobre antiguos lechos lacustres, condición que ha generado una mayor susceptibilidad al hundimiento progresivo.

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Escenarios futuros

“Se tendrá que tomar una decisión entre adaptarse a los cambios o enfrentar desplazamientos forzados”, advirtieron los expertos, al destacar que aproximadamente el 70% del subsuelo capitalino presenta condiciones de inundabilidad elevada.

Monitoreo permanente

Las mediciones más recientes indican que la zona del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) muestra el mayor ritmo de descenso, con registros de 40 cm por ciclo anual. Otras delegaciones mencionadas presentan descensos variables entre 15 y 30 cm anuales, mientras que Cuauhtémoc registra descensos menores pero persistentes a partir de los 10 cm anuales.

El complejo hídrico Cutzamala celebró un importante incremento de sus reservas, registrando un almacenamiento del 49.9 por ciento al incorporar 7.53 millones de metros cúbicos de agua durante los últimos siete días. Esta recuperación estratégica beneficia directamente al Valle de México, donde opera con capacidad para suministrar 390.25 millones de metros cúbicos destinados a Ciudad de México y Estado de México.

Almacenamiento en presas clave

Los indicadores específicos de cada infraestructura revelan que la Presa Valle de Bravo alcanzó el 65.85 por ciento de su capacidad, mientras que las presas Villa Victoria y El Bosque muestran índices idénticos de 34.48 por ciento. Esta distribución permite mantener un flujo constante de 12.312 metros cúbicos por segundo hacia las zonas metropolitanas.

Distribución estratégica

El suministro se divide entre instituciones responsables: SEGIA recibe 7,345 metros cúbicos por segundo para gestión en la capital, mientras CAEM opera con 4,967 metros cúbicos por segundo destinados al Estado de México. Este sistema integrado transporta recursos hídricos desde fuentes en Michoacán y Estado de México hasta las altiplanicies del Valle, superando diferencias de elevación superiores a 1,100 metros sobre el nivel del mar mediante tecnologías de bombeo especializadas.

Importancia del sistema Cutzamala

Este sistema multifuncional proporciona el 25 por ciento del agua potable consumida en la Ciudad de México, consolidándose como un pilar fundamental en la seguridad hídrica regional. Su operación demanda significativos recursos energéticos debido al desafío técnico de elevar el líquido a zonas con altitudes considerables.

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“El Sistema Cutzamala es un complejo de presas, plantas de bombeo, acueductos y plantas de tratamiento que transporta agua desde el Estado de México y Michoacán hasta el Valle de México, especialmente a la Ciudad de México y la Zona Metropolitana”