Evaluación inicial del Comité CEDAW
El gobierno federal enfrentó una evaluación crítica durante su primera audiencia ante el Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (CEDAW) en el marco del 91° periodo de sesiones de esta instancia internacional. La delegación mexicana presentó su décimo informe periódico en Ginebra, Suiza, pero las observaciones de los expertos reflejaron un desempeño insuficiente en aspectos relacionados con la justicia de género y la autonomía de instituciones clave.
El Comité internacional ha emitido 209 recomendaciones específicas desde 1998, pero según informó Azucena Enríquez, secretaria académica de la Cátedra UNESCO de Derechos Humanos de la UNAM (CUDH-UNAM), alrededor del 70% de estas observaciones no han sido atendidas de manera adecuada por parte de las autoridades mexicanas.
Deficiencias en información y protección legal
Yamila González Ferrer, relatora especial del organismo, destacó que las respuestas proporcionadas por el Estado carecieron de datos estadísticos que validaran los supuestos avances en la protección de las mujeres víctimas de violencia. Se señaló la ausencia de registros desagregados sobre feminicidios, desapariciones y otros delitos de género, lo que impide evaluar la efectividad de las políticas públicas implementadas.
Los expertos expresaron preocupación por retrocesos institucionales que afectan la impartición de justicia con perspectiva de género. Entre los puntos críticos destacan la debilidad del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (CONAPRED), la pérdida de autonomía del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) y la situación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
Composición de la delegación oficial
La representación gubernamental estuvo integrada por figuras clave del gabinete federal y el legislativo, entre ellas Citlali Hernández, titular de la Secretaría de las Mujeres; Francisca Méndez Escobar, embajadora de México ante la ONU; Jennifer Feller, directora general de derechos humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores; Jannet del Rosario Cruz, representante del Consejo Nacional de Pueblos Indígenas; y Martha Lucía Micher, senadora y presidenta de la Comisión para la Igualdad de Género del Senado.
Marco normativo y autonomía institucional
La relatora señaló que, aunque la Constitución Política mexicana prohíbe la discriminación, carece de una definición específica conforme a la CEDAW, no reconoce explícitamente la discriminación indirecta ni incorpora el principio de interseccionalidad. Se destacó la debilidad operativa del CONAPRED, que «carece de poder sancionador» y enfrenta limitaciones para hacer efectiva la protección contra la discriminación.
En materia judicial, se cuestionó cómo la reforma propuesta garantizaría que los nuevos jueces cuenten con capacitación en perspectiva de género y cómo se evaluaría su desempeño. También se expresó preocupación por la posible desaparición del INAI como organismo autónomo, considerando que las nuevas estructuras no aseguran la misma independencia.
Respuestas del gobierno mexicano
Citlalli Hernández afirmó que desde 2018 se han realizado modificaciones en la administración pública sin eliminar facultades institucionales, aunque no precisó cómo se mantiene la autonomía de organismos afectados por la reestructuración. Martha Lucía Micher señaló que la Ley de Igualdad entre Mujeres y Hombres incluye nuevos elementos de discriminación, aunque reconoció que podría ampliarse.
Jennifer Feller explicó que la reforma a la ley de protección de datos no afecta los derechos reconocidos constitucionalmente, aunque omitió mencionar la dependencia de estas funciones del Poder Ejecutivo. Sayuri Herrera indicó que todas las entidades cuentan con fiscalías especializadas en violencia de género y destacó la reforma constitucional que obliga a armonizar legislaciones locales.
Mecanismos de justicia y protección
Se anunció la creación del Tribunal de Disciplina Judicial como instrumento para combatir la impunidad en casos donde jueces han omitido aplicar perspectiva de género. La magistrada Mónica Soto destacó que actualmente solo el 30% de cargos judiciales de alto nivel son ocupados por mujeres y que la reforma incluye mecanismos paritarios de designación y capacitación especializada.
Ingrid Gómez Saracibar detalló que la CONAPRED ha recibido quejas por discriminación en diversas categorías, siendo los principales motivos la discapacidad (18%), la condición de salud (15%), el género (15%), el embarazo (11%) y la apariencia física (6%). Se reconoció la necesidad de cambios legislativos para mejorar su efectividad.
Jennifer Feller aseguró que la autonomía de la CNDH está garantizada normativamente, aunque se destacó su rol en la emisión de recomendaciones con enfoque de género. Para apoyar a las madres buscadoras, se otorgan medidas de apoyo como alimentos y alojamiento, enfocándose en la protección de núcleos familiares vulnerables.
Contexto indígena y capacitación judicial
Jannet del Rosario Cruz señaló avances en la reforma constitucional al artículo 2º que garantiza el derecho a intérpretes y peritajes antropológicos en procesos judiciales indígenas. Se mencionó la designación de Hugo Aguilar Ortiz en la Suprema Corte como un paso hacia una justicia intercultural y el desarrollo de una Ley General de Derechos de los Pueblos Indígenas.
Representantes del Poder Judicial informaron que, aunque persisten desafíos de homologación en materia penal, existen criterios vinculantes para incorporar la perspectiva interseccional. Se han implementado 102 programas de capacitación en el Poder Judicial, incluyendo un curso desarrollado con ONU Mujeres que ha alcanzado al 59% del personal judicial.
La audiencia continúa con el análisis de otros artículos de la Convención, mientras se espera el informe final del Comité CEDAW sobre el cumplimiento de obligaciones internacionales por parte de México.